En el año de nuestro señor de 504 las cosas se estaban poniendo realmente feas para los caballeros del Condado de Salisbury, y de todo Logres. Las amenazas venian por todos los flancos, y las fuerzas de logres, mermadas de tanta guerra y de tanto pagar al enemigo, empezaban a flaquear.
Por el oeste Cornwall con el Rey Idres y el Príncipe Mark asolaban Somerset y saqueaban los señoríos que cogían a su paso, entre ellos Salísbury. Por el sur la amenaza venía del Rey Sajón Cerdic, hijo de Votigern, mientras que por el este los reyes Aelsweith, Aesc y un largo etcétera de Houscarls, Jarls, y reyezuelos sajones amenazaban toda Britania, especialmente tras haber sido tomada la capital, Logres.
A la corte de Sarum llega Cynric para pedir diezmo para la guerra a favor de Cedric, mientras por el norte, un viejo conocido de nuestros caballeros, el irlandés Sir Lak de Estregales, viene a hablar de parte de su señor Nanteleod. Las noticias de un guerrero tan victorioso que había vencido a los sajones en Lindsey, derrotando a su vez a Malahaut, rey de los Cien Caballeros, hace que la Condesa Ellen se plantee dejar de pagar a Cedric y aliarse con Nanteleod.
Tras hablar con sus caballeros la respuesta es clara. Ya no pagarán vasallaje a Cedric ni a nadie, y se aliarán con el britano más poderoso, Nanteleod. Cynric desaparece enojado, amenazando con las consecuencias de dicha decisión.
Los planes pasan por permitir que Nanteleod baje con sus huestes a través de Rydichan y Salisbury y ataque a Cedric en el sur. Esto permite a Salisburi elegir entre derrotar a Cedric o centrarse en Idres.
El invierno que sigue lo pasan volviendo a los castillos de Du Plain y Sarum, aprovisionándose y resguardando a mujeres y niños lo mejor posible. Las tierras de Salisbury quedan a merced de quien quiera saquearlas, mientras los soldados se atrincheran en sus fortalezas a la espera de la llegada de Cedric y Nanteleod.
Al año siguiente vendrían las Batallas.
Por el oeste Cornwall con el Rey Idres y el Príncipe Mark asolaban Somerset y saqueaban los señoríos que cogían a su paso, entre ellos Salísbury. Por el sur la amenaza venía del Rey Sajón Cerdic, hijo de Votigern, mientras que por el este los reyes Aelsweith, Aesc y un largo etcétera de Houscarls, Jarls, y reyezuelos sajones amenazaban toda Britania, especialmente tras haber sido tomada la capital, Logres.
A la corte de Sarum llega Cynric para pedir diezmo para la guerra a favor de Cedric, mientras por el norte, un viejo conocido de nuestros caballeros, el irlandés Sir Lak de Estregales, viene a hablar de parte de su señor Nanteleod. Las noticias de un guerrero tan victorioso que había vencido a los sajones en Lindsey, derrotando a su vez a Malahaut, rey de los Cien Caballeros, hace que la Condesa Ellen se plantee dejar de pagar a Cedric y aliarse con Nanteleod.
Tras hablar con sus caballeros la respuesta es clara. Ya no pagarán vasallaje a Cedric ni a nadie, y se aliarán con el britano más poderoso, Nanteleod. Cynric desaparece enojado, amenazando con las consecuencias de dicha decisión.
Los planes pasan por permitir que Nanteleod baje con sus huestes a través de Rydichan y Salisbury y ataque a Cedric en el sur. Esto permite a Salisburi elegir entre derrotar a Cedric o centrarse en Idres.
El invierno que sigue lo pasan volviendo a los castillos de Du Plain y Sarum, aprovisionándose y resguardando a mujeres y niños lo mejor posible. Las tierras de Salisbury quedan a merced de quien quiera saquearlas, mientras los soldados se atrincheran en sus fortalezas a la espera de la llegada de Cedric y Nanteleod.
Al año siguiente vendrían las Batallas.
Y así fue que Cedric puso sitio a Sarum ante el pavor de sus habitantes. Sin embargo la condesa tenía planes que ni siquiera sus caballeros de más confianza conocían: mandó al norte hasta la abadia de Amesbury a 200 de sus mejores caballeros para que fueran a unirse a Nanteleod y así levantar el sitio de Sarum y machacar al sajón. Sin embargo la capacidad de olfato y de huida de Cedric se demostró excepcional. Los caballeros pudieron ver en Cedric un estratega de un calibre que ignoraban.
Por tres veces tuvieron que asolar en batalla a Cedric, persiguiéndole por medio Logres: Levcomagus, Royston y Hertford. Las tres fueron grandes victorias para los britones y en la última además se unió el rey de Anglia Aethelswith, que fue muerto en combate.
Así pues, mientras los sajones se lamen sus heridas, Nanteleod planta batalla a los enemigos de sus aliados, y así hace frente a Idres de Cornualles, persiguiendo y asolando sus fortalezas, recuperando gran parte de las tomadas en Somerset, pero sin llegar a plantar batalla frente a frente.
Las noticias que llegan desde los mentideros es que Nanteleod está tratando de convencer al Consejo Supremo de Britania para ser nombrado Alto Rey.
Por tres veces tuvieron que asolar en batalla a Cedric, persiguiéndole por medio Logres: Levcomagus, Royston y Hertford. Las tres fueron grandes victorias para los britones y en la última además se unió el rey de Anglia Aethelswith, que fue muerto en combate.
Así pues, mientras los sajones se lamen sus heridas, Nanteleod planta batalla a los enemigos de sus aliados, y así hace frente a Idres de Cornualles, persiguiendo y asolando sus fortalezas, recuperando gran parte de las tomadas en Somerset, pero sin llegar a plantar batalla frente a frente.
Las noticias que llegan desde los mentideros es que Nanteleod está tratando de convencer al Consejo Supremo de Britania para ser nombrado Alto Rey.
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